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El Parque Nacional de Komodo se encuentra en las islas menores de la Sonda, en Indonesia.
Declarado Patrimonio de la Humanidad, se creó en 1980 para proteger al dragón de Komodo -el lagarto más grande del planeta dado que puede medir entre 2 y 3 metros y tiene un peso promedio de 70 kilos- pero progresivamente fue aumentando sus objetivos bajo el nombre de “ecoturismo”.
Actualmente un proyecto turístico apodado “Jurassic Park” en las redes sociales ameanza la biodiversidad del lugar y a sus habitantes en peligro de extinción y pese a la advertencia de la UNESCO de que los planes podrían tener un impacto medioambiental negativo, la obra para crear un nuevo centro turístico seguirá en construcción.
El mes pasado, funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declararon en una conferencia del Comité del Patrimonio Mundial que el proyecto requería una nueva evaluación de impacto ambiental por las preocupaciones sobre la pesca ilegal y el riesgo potencial para el hábitat natural del dragón de Komodo. Sin embargo desde el Ministerio de Medio Ambiente de Indonesia sostienen que el proyecto “va a seguir” y que “se ha demostrado que no tiene ningún impacto”.
Los funcionarios de la UNESCO indicaron en la reunión del mes pasado que habían solicitado una evaluación actualizada al gobierno indonesio, pero que no habían recibido respuesta. Parte del problema es la falta de claridad de los planes que tiene el Gobierno indonesio al respecto. Lo que se sabe hasta ahora según medios internacionales que será “lugar turístico de lujo”. ¿Pero a qué costo?.