El diputado Carlos Del Frade, al cumplirse este 24 de abril 42 años del primer embarque grande de cocaína que trajo la dictadura de Banzer por un acuerdo con la dictadura de Videla, presentó un proyecto de comunicación pidiéndole al gobierno provincial que le exija a la DEA los informes anuales y el detalle de las actuaciones que tuvieron sus agentes en el territorio santafesino desde 1998 al presente.
En el proyecto Del Frade explica que en diciembre de 1998, los diarios nacionales informaban la DEA -la agencia antinarcóticos de los Estados Unidos- preveia un fuerte crecimiento del tránsito y consumo de drogas ilícitas en la Argentina para próximos años, como parte de un fenómeno internacional más amplio.
El responsable del mencionado informe de la DEA en Argentina fue Abel Reynoso, por entonces titular de la oficina en el país.
Reynoso sostuvo, a fines de 1998, que “se viene una ola en el tráfico y consumo de drogas en la Argentina… El problema de la droga se manifiesta directamente en la violencia urbana. Esto no es un mito, tampoco una historia de película, sino es una realidad que vemos la gente que trabaja en el tema”, apuntó el entonces titular de la DEA en Argentina.
“En aquella disertación surgieron, por primera vez, los puertos del departamento Rosario y San Lorenzo como lugares marcados como ingreso y egreso de estupefacientes”, remarca el legislador e investigador santafesino.
Pero no todo es una cuestión de historia porque en 2018, desde la sede central, la agencia estadounidense volvió a ratificar el rol central del sistema portuario de la provincia de Santa Fe en el entramada de importación y exportación de sustancias tóxicas.
La investigación que avala el proyecto expica también que un día como hoy, 24 de abril, pero de 1978 habría ocurrido el primer desembarco de 200 kilogramos de cocaína en la zona franca boliviana en el puerto rosarino, previo acuerdo entre las dictaduras de Hugo Banzer y Jorge Videla, en Bolivia y Argentina, respectivamente.
Aquel hecho, denunciado en la justicia federal brasileña y luego en la rosarina en el año 2009, estuvo auspiciado por algunos integrantes de la DEA según lo contó un ex agente de la misma.
“Por estos hechos es preciso conocer oficialmente de parte de la DEA los informes y las actuaciones desarrolladas, por lo menos desde 1998 hasta la actualidad, en la provincia de Santa Fe. Es de interés legislativo conocer, entonces, cada uno de esos informes oficiales de la DEA en los que se encuentran nombrados distintos lugares de la provincia de Santa Fe”, concluye el legislador del Frente Social y Popular.
