Bitácora de un astrónomo

“Un libro donde narro mi vida como observador, anécdotas, fenómenos y por sobre todas las cosas mi pasión la astronomía”, afirma su autor Adrián Arquiola

El libro de Adrián Paulo Arquiola, Director Observatorio Astronómico Municipal de Funes “Bitácora de un astrónomo”, estará disponible en septiembre, deja en él plasmado su trabajo como observador del Universo, toda su trayectoria, anécdotas, fenómenos y por sobre todas las cosas su pasión por la astronomía.

Este mediodía visitamos a Adrián en el Observatorio, allí nos relata, “Este proyecto lo tenía desde hace años, hacer el libro contando en una síntesis los casi 40 años que llevo estudiando e investigando la Astronomía, en la que incursioné antes de cumplir mis 10 años, dónde comparto todas mis vivencias, avistamientos y experiencias de trabajos que he llevado adelante en forma silenciosa, actividades que me han desvelado hasta altas horas de la madrugada, con detalles de fenómenos que son interesantes para contar. Ahora los tiempos de Cuarentena en Pandemia me permitieron pausar mis rutinas y aprovechar el tiempo en que el cielo había cambiado también, con una calidad atmosférica más nítida para fotografiar, como se destaca en la tapa.

El título lo elegí porque se caracteriza por ser un libro de guardia, dónde relato los fenómenos que he avistado cronológicamente, por supuesto que, en una síntesis, algunos como los eclipses de luna he detallado solo los más importantes, y otros fenómenos los he destacado porque han sido únicos y exclusivos.

El cielo funense está enmarcado como suburbano, y si bien vivo en las afueras de nuestra ciudad, pero sobre el horizonte este, sobre el que está Rosario vemos todo el smog y la luminosidad, pero lo necesitamos porque cuando no está el smog presente la luminosidad se transmite menos, por eso en este tiempo en que se detuvo la movilidad y la combustión mundial, esto fue muy notable incluso a nivel regional.

Ahí apoyé en parte el significado de la tapa del libro: una noche hice una sección lunar y pude tomar una imagen de alta resolución y al poner el monitor, me asombré, (A pesar de que la luna es una de las primeras avistaciones que uno hace y nunca cansa) de la nitidez y la calidad que sólo se comparan a las que se toman en la zona de montañas…daba la sensación de poder tocarla con la mano, entonces al verla mi señora me dijo, “esta es la foto que tenés que poner en la portada del libro”.

Hay un capítulo especial, dónde cuento todas las características sobre el avistaje que marcó mis comienzos en la astronomía Observacional y de contribuir a la parte científica dejando todas las aclaraciones sobre que es una estrella variable, las condiciones técnicas que se necesitan.También con datos de actualidad, por ejemplo, hace poco los catálogos han informado datos con que no contaba años atrás, sobre la distancia a que se encuentra con precisión, casi a 280 años luz de la Tierra.

“Bitácora de un astrónomo“, estará listo en septiembre para su presentación, pero dependo de la situación sanitaria, para saber si lo podemos hacer en forma presencial, o no.

Soy un divulgador por excelencia y me gusta el contacto con los niños, la comunidad educativa, la gente, pero hoy no se posibilita, veremos… mi ansiedad me juega en contra en este momento, ya quiero mostrarlo, por eso si no se puede lo haré en forma virtual.

Uno de mis objetivos de este libro es que sea un eslabón más de la cadena que forma la historia de Funes.

Esta Pandemia nos ha demostrado como la humanidad interfiere en la evolución del planeta en forma artificial, por eso nos deja la enseñanza de que tenemos que cambiar nuestras conductas y valorar la vida en la tierra, mensajes que plasmo en esta edición porque es otra forma de demostrar todo lo que abarca la astronomía”, nos comenta Adrián.

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