El Intendente José María Pedretti invitó a su tradicional brindis de fin de año.

En su discurso ante los presentes explicó el alcance de la crisis financiera nacional, como influyó en su gestión, ”estos desafíos, son los que agudizan la capacidad de trabajo, los sentidos, pero también humanizan a las personas,  porque uno tiene que dejar de ver a los números como tales para darle prioridad esencialmente a lo social, desde lo institucional, para darle respuesta a toda esa gente que la está pasando mal.

A veces nos ahogamos en un vaso de agua, pero debemos analizar que tenemos dos posibilidades, o nos ahogamos o tomamos el desafío de salir del problema, como recién nos comentaba un vecinalista: Las cosas hay que transformarlas, en vez de quejarse y sufrir, hay que aplicar la sabiduría de hacer.  En el video que compartimos, recordé las cosas que hicimos este año, fueron muchas.

Hoy aquí compartimos con quienes integran Clubes, Iglesias Evangélicas, Asociaciones Civiles, que fueron creadas en algún momento específico, para una necesidad concreta que tenía la ciudad en algún momento de la historia, el Country con sus más de 100 años, los Bomberos con más de 30, pero nosotros reconocemos que son todas apéndices directos del municipio, porque son quienes por ejemplo contienen a nuestros jóvenes haciendo atletismo, futbol, tenis, danza, folclore o cualquiera de esas actividades que ayudan a contener a ese chico lejos de la calle, al igual que los pastores de la Iglesia Cristiana, a quienes visito en forma permanente, ellos contienen a un montón de jóvenes que están saliendo de adicciones y problemáticas complejas.

Cuando contamos en la ciudad con todo este tipo de Instituciones que trabajan sin esperar ningún reconocimiento, salvo la satisfacción de poder ayudar a muchos padres a formar a sus hijos, es lo que Perón marcaba como “una Comunidad Organizada”.   

“El desafío que viene para el 2019 es muy grande. Por eso le pido a Dios dos cosas, sabiduría y humildad, sabiduría para enfrentar el camino difícil que se avecina, ya que ningún economista avizora que vallamos a mejorar, en el mejor escenario vamos a repetir lo del 2018. Pido a Dios me ilumine para poder llevar por buen destino a la ciudad de Roldán, y humildad para seguir siendo lo que fui toda mi vida, alguien que tiene responsabilidades especiales, distintas. De nuestro municipio dependen más de 800 familias en forma directa e indirecta, por eso pedimos que en el 2019 podamos mejorar esto”.

 “Que Dios que nació hace poquito entre en sus corazones y los bendiga a cada uno de ustedes. Pero sobre todo que bendiga a nuestra querida Ciudad”, culminó el mandatario