El gobierno nacional despidió a más de 1.200 trabajadores de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Ansés), cerca de un 10% del total y por eso algunas de las 400 oficinas de atención al público cerraron sus puertas por falta de personal.
En Santa Fe, los empleados denunciaron el desmantelamiento de las sedes de Ansés por ejemplo en Funes y Puerto General San Martín (había solo tres puestos), en el sur, o de Vera y en Villa Ocampo, en el norte, lo que dejaba sin cobertura a amplias zonas de la provincia.
Con este ataque al organismo público, no quedarían espacios abiertos para hacer trámites (en temas tan sensibles como jubilaciones, pensiones, asignaciones familiares, beneficios sociales). Por ejemplo, entre las ciudades de Santa Fe y Reconquista (hay unos 300 kilómetros de distancia hacia el norte).
También en el sur, el recorte obliga a concentrar la atención de pueblos y ciudades en Rosario, con los costos extras de traslado que eso implica (desde Puerto San Martín el transporte sale 2.300 pesos y desde Serodino 5.400, por ejemplo).
Rubén Román, secretario de la Asociación del Personal de los Organismos de la Previsión Social (Apops), contó que los trabajadores dejaron de atender este miércoles a la tarde ante el impacto que generó esta segunda ola de cesantías (se suman a otras 450 en enero).
“Las medidas son el todo el territorio nacional, porque en todas las oficinas, desde La Quiaca hasta Ushuaia han sufrido despidos, es directamente un desmantelamiento del organismo”, dijo Román
El dirigente sindical aclaró que “bajan no solo contratos sino que despiden a compañeros de planta permanente, sin ninguna causa y sin respetar la estabilidad del empleado público, porque quieren bajar la prestación y las políticas públicas hacia la ciudadanía”.
“De solo 500 trabajadores para toda Santa Fe y Entre Ríos, las dos provincias que tienen casi 40 oficinas, hemos tenido despidos del 10% hasta el momento”, siguió Román.
El vocero de Apops señaló que cesaron contratos que terminaban el 31 de marzo.